martes, 3 de julio de 2018

Semana 247: "de la tristeza a la sorpresa, de la euforia a la resignación"

LUNES: Si bien no soy diseñador, me las ingenio para hacer cositas fáciles que ayuden con el tráfico de pendientes. Esta vez me toca un laburo simple pero largo y cansador: cambiarle la firma al correo de todos los empleados. O sea, salir a caminar por esta jungla para confirmar el interno de casi 240 personas y preguntarles si quieren (o no) que figure su celular. A gastar zapatilla...

Hoy se reincorporó un compañero de sus largas vacaciones por tierras sureñas. Su periplo incluyó Brasil, Argentina y Uruguay. Luego de contar lo hermosa que estaba Buenos Aires, nos repartió el clásico y esperado "detalle" a todos los compañeros. La sorpresa vino en forma de dos tapas separadas por dulce de leche y cubiertas por chocolate blanco. La nostalgia hizo que sea una delicia:


MARTES: ¿Por qué el sufrimiento es nuestra marca registrada? ¿Por qué nunca podemos obtener ningún resultado de manera normal? ¿Por qué cada cosa que queremos nos cuesta el doble? ¿Por qué tenemos que golpearle la puerta al mismísimo San Pedro cuando necesitamos una mano? ¿Por qué el destino nos lleva hasta el límite y nos mantiene ahí un buen rato?

Podría estar todo el día haciendo preguntas y difícilmente encuentre las respuestas. El resumen de todo podría ser ese ADN tan nuestro que hace que no disfrutemos cuando algo viene fácil, que se caracteriza por el esfuerzo y el sacrificio; y que nos hace disfrutar extasiados cuando le hacemos fuckyou al destino... O cuando Rojo mete el gol del triunfo en los últimos minutos.

El triunfo de hoy ante los ojos del mundo

MIÉRCOLES: Pronto empiezo a concretar uno de los pendientes que tengo desde hace mucho tiempo: estudiar inglés. Espero que las tres veces anteriores queden en anécdotas fallidas y que este último intento sea el que finalmente me haga entender el idioma, hablar correctamente, pronunciar como un británico y sobre todo, cantar sin que parezca un dialecto indígena. 

Los procesos han cambiado en los institutos de enseñanza desde la última vez que agarré un libro: cerré la propuesta con un asesor de ventas, tuve una "inducción" con el Director de la sede adonde voy a ir y en cuanto a las clases, los profesores se irán alternando para acostumbrar al oído a distintas pronunciaciones. No me rompan las pelotas y por favor arranquemos de una vez...


JUEVES: La lesión en la rodilla que arrastro desde hace dos meses empieza su lento período de recuperación. Tuve cita con la fisioterapeuta del gimnasio para diagramar lo que será la rutina de ejercicios que acompañará a las terapias de kinesiología. Hace 10 años me operaron la rodilla izquierda por rotura de meñiscos y no pienso lesionarme de nuevo. 

En varios posteos habrán leído mis opiniones sobre el sistema de salud; esto no es producto de mi inconformismo "natural", es una queja hasta de los mismos colombianos. Luego del incidente de la rodilla y de algunas experiencias ajenas negativas, tomé la decisión: haré un esfuerzo económico y con el upgrade en el plan; espero que cambie mi presente (y mi paciencia).


VIERNES: Este compañero que estuvo de vacaciones en Argentina me trajo un encargo especial que le hice. Parece mentira que aún en 2018, la globalización no haya logrado que el Fernet Branca se venda en Colombia. Todos los que se consiguen son por gente que viaja y trae, teniendo que pagarlo hasta 3 veces más de lo que vale. El amor por esta belleza lo puede todo...


SÁBADO: Aunque con un poco de miedo (no voy a negarlo), las expectativas sobre el partido de la selección eran las mismas de siempre: somos Argentina y nada puede malir sal... Aunque viendo lo que fue el proceso de clasificación, la fase inicial y teniendo en cuenta que en estas instancias un error te deja afuera, la confianza y la necesidad de un milagro terminan siendo sinónimos.

Como siempre, los que creímos en ese milagro fuimos nosotros; los millones de argentinos que en el país o dispersos por el mundo, seremos fieles e incondicionales a la selección. La juntada fue en una parrilla argentina con dueño argentino, con mate y facturas como corresponde. Con la misma intensidad pasamos de la tristeza a la sorpresa, y de la euforia a la resignación. Nos vemos en otros 4 años...


DOMINGO: Pasada la desilusión de ayer, hoy fui más argentino que nunca. Finalmente tomé una decisión que venía meditando desde hace bastante y esta semana la terminé de definir: me compré un asador para el balcón. A partir de ahora mis comidas ya no serán las mismas; estoy feliz por retomar una costumbre que con los años se convirtió en tradición.

Desde que tengo uso de razón, mis almuerzos de domingo en Argentina eran de asado y ensalada; por eso no quería esperar más. Lamentablemente y por cuestiones obvias es a gas, espero acostumbrarme con el tiempo. Esta vez y por ser el primer uso, lo inauguré con algo fácil y rápido; lo próximo será una buena carne que me transporte (aunque sea por un ratito) al mejor país del mundo.



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