Semana 115: "No me regalaron nada".

LUNES: Hoy me desperté con una canción en la cabeza y la única manera de que eso no se transforme en locura fue escuchándola. Luego sonó otra y otra, todas con el volumen alto como corresponde. Hasta que enviaron un mail general (mooooy gorra) que decía "por los variados gustos, solicito que utilicemos audífonos". WTF? Somos una agencia de publicidad papá! No somos un estudio de abogados! Yo me banco el reggaetón de mierda y nunca digo nada...

Por la noche tuve un encuentro más que especial, un amigo y su novia están vacacionando en Colombia y pasaron unos pocos días por Medellín. Pizza y un par de cervezas eran obligatorias para charlar un rato, reírnos bastante y tratar de ayudarlos con cositas básicas para que se muevan por estas tierras.      

He aquí el culpable y pregunto: ¿se puede escuchar Foo Fighters bajito?

MARTES: Después del arranque de ayer, hoy el estudio de abogados estuvo tranquilo; obviamente sin música. Por el día de Amor y Amistad (una mezcla del Día del Amigo y San Valentín) jugaron al amigo invisible, o amigo secreto como lo bautizaron en estas tierras. Por suerte esta vez zafé de que me metan, el año pasado me obligaron y me pasó lo que ya sabía: no me regalaron nada.

Este juego no me gusta y voy a explicar el porqué: la impunidad de la gente sin códigos que no respeta la regla básica y no regala nada. El tiempo pasa y el juego pierde sorpresa y entusiasmo. He tenido tantas desilusiones de este tipo a lo largo de mi vida que le perdí el gusto al juego. Por eso nunca más volví a jugar, y acá en Colombia son bastante fanáticos. Mil disculpas, espero me entiendan.

Sí macho, del baño y potable... Ya mismo la estoy tomando.

MIÉRCOLES: Hoy al mediodía tenía cita con un profesor, para retomar uno de mis gustos y/o hobbies que más disfruto. Se me hizo tarde el almuerzo, una cosa llevó a la otra y llegué a las 2 PM. Suerte que queda cerca del laburo porque no estaba disponible, había comenzado con una clase. Me llamó a la tarde y arreglamos para mañana; va a volver algo lindo en mi vida...

Me pidieron que entregue un laburo a las 6 de la tarde porque íbamos a tener una conferencia con un cliente a esa hora. ¿Whaaaaat? Ni en pedo... Me apuro, entrego todo antes y la tenemos más temprano. Fue al pedo porque el tipo se liberaba 5.30 PM. Nos quedamos esperando y también fue al pedo, la pasaron para mañana. Claro, yo no tengo otra cosa que hacer que esperar a este cristiano.

Medellín y sus bellezas.

JUEVES: Finalmente llegué a tiempo y hoy pude tener la reunión que ayer quedó trunca. Me encontré con el profe, hablamos mucho, discutimos precio, cerramos día y hora y listo: el próximo miércoles a la 1 PM retomo mi antigua pasión, vuelvo con mis clases de batería!

Ayer conté que me pidieron un laburo de apuro para entregar a última hora porque tenía una conferencia con un cliente a las 6 PM. La patearon para hoy a primera hora; o eso pensaba, porque no tuvimos ni noticias del cliente. Un copado el pibe, estamos a tu disposición maestro...

A partir de la semana que viene, mi nueva y linda rutina

VIERNES: Hoy no vamos a hablar de trabajo porque las chicas de Cuentas te apuran para entregar los proyectos, pero a la hora de presentarle al cliente últimamente se están tomando sus merecidas vacaciones. De las varias reuniones que tendríamos que tener, esta semana no se concretó ninguna; así que quedarán seguramente para la semana que viene.

Al mediodía cuando me fui a almorzar nadie entendía nada, estaba cargado con bolsas de supermercado y llenas de productos. Es que dejé la heladera descongelando y me tocó llevar todo a la agencia para que nada se pudra. Nadie va a creerlo pero disfruté limpiarla, quizás porque en un momento se generó una batalla entre el hielo pegado y yo; en la que salí triunfador de la difícil contienda.

Lo único que quise durante todo el día fue que llegara la noche. No tenía una fiesta, no tenía un concierto y mucho menos una cita; hoy empecé a terminarme el tatuaje. ¿Qué significa esto? Que queda la sesión de hoy y una próxima sesión que será la última, para que de una vez por todas se termine de rayar este maldito brazo.   

SÁBADO: Amo la tecnología más que nadie porque la tomo como una necesidad, en mi caso hacen que 5000 km de distancia se simplifiquen en un par de mensajes de whatsapp. Y particularmente hoy que me sentí más solo que nunca, sirvió para hablar con mis viejos y hermana, y fue un alivio saber que en algún lado del planeta están esperando que vuelva. 

El cine de este fin de semana estuvo dedicado a una locura llamada Antiviral; una sátira que imagina una sociedad del futuro fanatizada con las celebridades, con gente obsesionada hasta con tener las enfermedades de los famosos. Dirigida por Brandon Cronenberg (hijo de David Cronenberg); es una película densa, si pensás verla mejor guardate los pochoclos.

DOMINGO: Hoy volví a salir luego de muchos domingos de sol y piscina, quizás la lluvia y el cielo gris hayan sido los encargados de que corte con esa vida sedentaria y descansada. Y elegí un lugar para visitar que lo confirma, porque fui al último día de La Feria del Libro. Mucha gente, un lugar ideal y libros por todos lados; a pesar del día, nada puede salir mal...

Además de libros, el domingo ofrecía más películas para disfrutar. Esta vez fue Balada de un hombre común, o su título original "Inside Llewyn Davis". Escrita y dirigida por los hermanos Coen, muestra
la vida de mierda de "uno de los que no fue Bob Dylan"; un músico folk que tropieza de fracaso en fracaso y arruina todo lo que se le cruza por delante (como la vida misma). No es recomendable a depresivos en vías de recuperación.