lunes, 2 de junio de 2014

Semana 48: primer año en Colombia...

LUNES: Amanecí en Bogotá y fui tempranito a Relaciones Exteriores para hacer el trámite para renovar la Visa de Trabajo. Ya fui una vez y estaba cerrado; esta vez tampoco pude hacerlo porque me faltaban un par de papeles.


Me moví más rápido que nunca porque el lugar cerraba al mediodía y eran las 9.30 de la mañana. Llamé a Medellín a mi agencia actual para que me los manden por mail y los imprimía; necesitaba uno de mi agencia anterior de Bogotá y llamé a RRHH para que me los preparen. Volví luego de 6 meses y me encontré con la gente linda de siempre...


Junté todo y fui cagando a migraciones a buscar el último papelito que me faltaba. Expliqué mi situación y me daban cita para el 10 DE JUNIO para atender mi caso. Eeeeeeh? WTF? No se puede hacer antes? Su mejor consejo fue: "buscá ese papel en Medellín que seguro no hay nadie".

O sea, por ese puto papelito voy a tener que viajar otra vez a Bogotá. Maldita burocracia colombiana... Deprimido por no poder hacer nada, almorcé y fui a instalarme en el hotel, mañana hay reunión en un cliente y la agencia me pagaba la noche en Bogotá.


Luego de visitar a mi peluquero bogotano para que haga su trabajo, a la noche me junté con parte de mi exequipo para tomar una cerveza. Siempre es lindo volver a verlos porque los extraño mucho.

Parque de la 93, estaba "más lindo que nunca"

MARTES: Para variar, amaneció con el cielo que siempre recuerdo de mis meses anteriores en Bogotá: gris, frio, amenaza de lluvia... Así a buscar un taxi en la calle que me lleve al cliente, otra de las tareas difíciles de conseguir en estas tierras.

 
Reunión en el cliente y por suerte todo salió bien, se viene un gran y lindo proyecto. Salimos tan entusiasmados que ahí mismo llamé a un proveedor que conocía para contarle y ver lo que nos podía proponer.

El Director de Ingeniería encontró un pariente

Chau Bogotá, me vuelvo a Medellín con un sabor amargo. Vos no tenés nada que ver, te encontré hermosa como te dejé. Hasta dentro de poco...

"Me garcho a un viejito",
nota de interés en la revista del avión

MIÉRCOLES: Si pudiera transformar el día de hoy en deporte, se llamaría "Reunión Fútbol Club". Contabilicé tres y de variadas temáticas, que van desde nuevos a viejos proyectos, otra de novedades y otra más para sacar ideas para un laburo. 

El famoso caso de la "tostada humana"

Al mediodía fui a "Migraciones Medellín" para hacer el trámite que me pidieron en Bogotá. Luego de recibirme con un gentil y cortante "con el celular apagado y sin anteojos negros", otra vez la burocracia me sacó cagando: atienden de 8 a 11 AM. Estoy con toda la suerte para estos fucking trámites.

El día estuvo tranquilo y pude irme temprano para crossfit. Una semana pasó desde la última vez que fui, y el cuerpo me lo hizo saber...

Un kiosquito que me estoy armando...

JUEVES: Y me lo hizo saber de la manera más obvia, pidiendo más cama que de costumbre y haciendo que me despierte tardísimo. Por suerte vivir cerca del laburo hizo que, sin la necesidad de tomar un taxi, llegue a la agencia en 20 minutos.

Saqué los pasajes de lo que van a ser mis próximas vacaciones. Ahora que lo pienso, sacando diciembre que estuve todo el mes de visita en Argentina, desde 2012 que no me tomo "vacaciones" y me voy a un lugar nuevo. Creo que ya es hora, el último viaje fue a Chile en 2012. Se viene se viene Perú 2014...!!!

No todas son buenas noticias...

VIERNES: La mañana de hoy estuvo destinada a liquidar los trámites que me faltaban. Todo lo extra que me pidieron en Bogotá ya está listo, ahora sólo queda viajar de nuevo y cruzar los dedos. Es más, me voy a tirar a sacar la Visa del Mercosur, que dura 2 años y da otro tipo de ventajas (no pienso abrir un negocio, pero es bueno tenerla).

El lunes es feriado (o "festivo", como le dicen acá) y hay muchos proyectos a entregar. Y como era de esperarse, el viernes terminó muy tarde, yéndome de la agencia pasadas las 8 de la noche. Por suerte, mi amigos de Bs As me dieron una sorpresa hermosa, con un llamado vía Skype. Qué lindo fue verlos a todos juntos de nuevo, los extraño... 

 
Vino gente de la agencia de Bogotá a pasar el finde largo a Medellín; así que el viernes se terminó tomando y charlando en un bar del Parque Lleras, Woka:      


SÁBADO: Se presenta un laburo el martes a primera hora y lamentablemente, por todo lo que tuvimos en la semana, nunca lo pudimos agarrar. Decidido: hoy sábado se viene a la agencia con parte del equipo a terminarlo. Y como pasa en estos casos, uno trabaja y afuera es un día de puta madre...


A la noche me reservé para ver el Boca-River que se jugaba en el Estadio Azteca en México. Sin darnos cuenta, alguien nos vio en 2008 cuando fuimos con mi amiga Florcis y servimos de inspiración para que exista este partido (y esa persona se llene de guita):

Nuestro aporte al fair play
El Pietro, mi amigo mexican...

DOMINGO: Hace mucho que no escribo este tipo de líneas, esas que salen de adentro y cuentan mucho más que un ficcionado día a día. Este primer aniversario en Colombia lo exige, así que dejo de lado la facilidad de lo diario y dejo una pequeña y sincera reflexión.

Hace un año que me fui y parece mentira pero siendo el que lo vivió; siento que no fue nada, todavía no hice nada y me queda mucho por hacer y/o conocer. Aunque en este momento me encuentro en pleno quilombo por la renovación de la Visa, no me importa porque tanto Bogotá como Medellín me completaron como persona; y todavía hay recipiente para llenar...

Además de conocer gente hermosa a la que (si puedo) veo cada vez que voy, la primera etapa fue muy difícil. Bogotá, me enseñó a vivir en otro país, a extrañar a mi gente, a recordar mi antigua rutina con lágrimas en los ojos y a sacar fuerza de lugares internos que desconocía (aunque no siempre se pudo). Pero lo más importante fue que entendí que siempre hay que tener las valijas listas, porque es mentira que el tren pasa solo una vez; el tren pasa todas las veces que uno esté dispuesto...

Y cuando creía que me quedaba en Argentina definitivamente, arrancó esta segunda etapa. Otra vez me venía a Colombia sin habérmelo propuesto, pero con la misma curiosidad, ganas y expectativas. Por suerte me encontré con un lugar donde las culturas se tocan por un montón de lados, y donde el tango y el "vos" a la hora de hablar, me hicieron sentir en casa.

Colombia, sólo puedo decirte gracias. Estoy muy contento de haber llegado hasta acá y tengo muchas ganas de más, tengo ganas de todo lo que me vas a regalar de ahora en adelante; sabés que me gusta conocer cosas nuevas y sólo te preocupás en que cada día me sorprenda con algo raro y diferente, llenándome el alma y haciendo que me sienta feliz.

Como hago siempre con cada día, tenía que pensar una foto o canción para cerrar este domingo. No tenía nada preparado y el destino, que cuando se pone las pilas es un aliado, quiso ayudarme haciendo que suene esto en el iTunes. Voy a terminar mi primer cumpleaños con una frase de mi amigo Gustavo: "cuando está oscuro, todo empieza a verse más claro"...



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