miércoles, 8 de agosto de 2018

Semana 252: "Así de preparado estoy"

LUNES: Antes cuando trabajaba en agencia a publicidad, pensar y preparar licitaciones era lo más normal del mundo (es una de las maneras para ganar nuevos clientes). Hoy por primera vez desde que me pasé a una empresa, viví lo mismo pero en la vereda de enfrente: vinieron dos empresas a presentar sus propuestas para un proyecto grande que se viene pronto.

Las sesiones de kinesiología tuvieron una pausa obligada. La falta de turnos disponibles hizo que tenga un bache de dos semanas, retomando casi cuando finalice agosto con las cuatro últimas terapias que me faltan. Como para despedirme a lo grande, me dieron ejercicios en una máquina que yo le daría otros usos. Aprender a surfear, por ejemplo...


MARTES: Luego de tres entrevistas fallidas y de resignarme a tener un practicante que ayude a cubrir el cupo pero que no termina de convencerme, milagrosamente cayó alguien del cielo. Ya tenía la búsqueda perdida y de última llegó un mail, como las cosas buenas que se guardan para el final. Una entrevista rápida fue suficiente, el equipo ya tiene una nueva incorporación.

Hay bandas argentina que tuvieron su apogeo en los 90s y luego desaparecieron sin dejar rastros, para luego resurgir en plan Fiesta Bizarren. Estos años viviendo en Colombia me dieron la respuesta que muchos sospechábamos: vinieron a robar a Centroamérica y son verdaderos capos de la escena rock en español. Para muestra, el sábado Vilma Palma toca como una de las bandas principales de un festival.


MIÉRCOLES: Mi buena memoria fotográfica pero pésima memoria a largo plazo, me hizo vivir una situación por la que ya pasé mil veces. Me encontré con un pibe que lo tenía visto de algún lado, pero que no tenía ni puta idea de quién era. Luego de charlar un rato me acordé: era un fantasma que trabajó conmigo y que echaron por coquetear con una cliente. Más vale perderlo que encontrarlo.

La tarde estuvo muy relajada, ya tenía el tiempo medido de laburo como para boludear y trabajar en iguales proporciones. Me puse con lo que faltaba para irme a casa tranquilito y a horario, y el análisis que hice me falló: no tuve en cuenta que la velocidad de mi máquina no es la mejor y me terminé yendo una hora después del horario habitual. Me lo merezco, un B-O-L-U-D-O con todas las letras.

Llegaron mis entradas para ver a Vilma Palma

JUEVES: Me llamó el Asesor Comercial de la empresa que me vendió el curso de inglés. Fue telepatía pura, tenía que llamarlo porque todavía no me llegó la factura de cobro. Me dice que la academia cumplía años y que estaba repartiendo regalos para los alumnos. Parece que este buen gesto tuvo consecuencias positivas, aprobé el 2do examen con mejor nota que el anterior. 

Como todo vendedor, el pibe maneja
la fidelidad de sus clientes a la perfección...

VIERNES: El próximo fin de semana el equipo no juega, así que la jornada laboral de hoy estuvo por demás tranquila. Finalizando el día, tuvimos la despedida de uno de los dirigentes más importantes del club, que se va a estudiar y a vivir una experiencia junto a los equipos más importantes de Inglaterra. Buen viaje!


SÁBADO: Finalmente llegó el día que estuve esperando durante mucho tiempo...!!! Bueno, en realidad no fue tanto; saber que venía una banda argentina a Medellín era motivación suficiente. Casi llegando me entero que el concierto había empezado una hora y media más tarde. Luego de aguantar un par de bandas soporte que no se soportaban más, salió Vilma Palma en escena y todo se vino abajo.

A medida que el tiempo pasaba, las 9 o 10 canciones que los posicionaron a nivel latinoamericano sonaron con la misma frescura que hace 20 años atrás. Los pibes no se guardaron ni un puto hit; literalmente el estadio se vino abajo. Con el recital terminado, todo el mundo se fue extasiado y extrañando esa juventud que ya no vuelve más.


DOMINGO: Si bien el concierto de anoche me llevó a través del tiempo a tener nuevamente 20 años, la realidad es que hoy el cuerpo me hizo saber que no los tengo. Hacía mucho que no me acostaba a las 3 de la mañana y mucho más, que algunos tragos de ron no me dejaban en este estado calamitoso. ¿Si lo repetiría? Así de preparado estoy:



No hay comentarios:

Publicar un comentario