martes, 20 de febrero de 2018

Semana 228: "...díganle que me perdone y vuelva"

LUNES: No debe haber miedo más grande que ver la llamada perdida de tu jefe una vez que ya llegaste a tu casa. Con el cuerpo invadido en terror y con más dudas que Samantha, le respondí con un tímido mensaje en Whatsapp: "hola, me llamaste?" Mucho peor si la acción del receptor del mensaje es llamarte nuevamente; matame, no quiero seguir viviendo.

Por suerte las películas siempre terminan con final feliz y el motivo del llamado no era más que avisarme sobre una reunión mañana temprano, por un tema importante pero nada complicado de resolver. Vuelve al alma al cuerpo y de a poco los temblores se van yendo. Ahora sí, a seguir con la vida normal.

Igual miré por la ventana y con esta vista, nada puede malir sal

MARTES: Me dijeron que hoy entraba uno de los nuevos diseñadores del equipo; pero las expectativas murieron cuando tuvieron que luchar contra la burocracia. Nada de lo que me dijeron se terminó cumpliendo, a nadie le importaron las urgencias del depto. y los que decidieron, poco (o nada) saben sobre nuestro trabajo. Si la profecía se cumple, tendré que esperar al viernes.
 
Y ojalá se cumpla, porque el jueves es el último día de la diseñadora y si no entra nadie nuevo me toca bajar la cortina y cerrar el Depto de Publicidad y Diseño. Pero antes de que se vaya tengo un rico regalo, de esos que se disfrutan desde el paladar hasta muy adentro del estómago. A la salida del laburo pasé por un local de tortas y ya está el encargue hecho. Claramente soy un jefe único... 


MIÉRCOLES: El viernes el equipo completo de Mercadeo tiene una reunión con el nuevo presidente, para que nos conozca y ponerlo en tema sobre todo lo que hacemos. Mi jefe nos juntó y dividimos tareas entre todos; cada uno hace una parte y se la pasan al argentino boludo, que se encarga de preparar el PPT poniéndolo lindo y presentable. 

Con el poco tiempo que tenemos, tocó quedarse y adelantar lo que se pueda hasta después del horario de salida. Mañana es un día largo y hoy quería salir temprano, pero gracias a esta bomba y al diluvio puto que inundó las calles, mis intensiones de empezar la temporada 2018 del gimnasio se escurrieron con el agua.

El equipo despide a Laura, te vamos a extrañar!

JUEVES: Concentración al máximo, enfoque definido y un objetivo claro; aunque traté de mentalizarme y priorizar la presentación de mañana, fue imposible lograr que la termine en un horario acorde a la jornada laboral habitual. La reunión definitoria de las 4 pm dejó algo muy en claro: hoy vuelvo a salir tarde. 

Y como si esto fuera poco, tipo 5 pm me habla alguien del Depto Médico, pidiéndome el PPT que le había prometido -pero que nunca habíamos quedado en día y hora-, porque mañana él también le presentaba al nuevo presidente. No es mi estilo dejar en banda a nadie, así que llegué a casa y me puse con eso. Me acosté a las 12 de la noche, pero por su respuesta del otro día valió la pena:


VIERNES: Dos días quedándome después de hora -ayer con trasnoche incluída-, más de 100 diapositivas y hasta el más mínimo detalle revisado; todo para que la reunión que en teoría iba a durar 4 horas, la terminen cortando antes de las 2 horas por temas de agendas y otras reuniones. Seguimos el próximo martes... Ah, si por ahí ven a mi tiempo perdido díganle que me perdone y vuelva.    

Por la tarde me invitaron a un evento relacionado al fitness, teníamos stand de nuestra tienda de productos oficiales y había que ir a chequear cómo iba todo (además necesitaba un poco de distención). Por un momento pensé que estaba en el lugar equivocado, entre tanta teta falsa y tanto abdomen retocado, creí que estaba en Expo Cirugía Estética.


SÁBADO: Me encantaría saber si todos/as los/as Hulks que estuvieron ayer, tendrían el mismo cuerpo si además tuviesen que dedicarle horas a la limpieza de la casa; quizás sea por eso que mis remeras siguen siendo talle M... Como cada 15 días, hoy me tocó limpieza general de la casa y lo logré gracias al kit música, guante y rulero; que acá vengo con el plumero...


DOMINGO: Vestir la casa nueva sigue siendo mi prioridad, aunque por falta de presupuesto no me queda otra que hacerlo de a poquito... Muy de a poquito. Para mi sorpresa viví una situación que no esperaba pero que se disfrutó al máximo: "señor, con su ticket de compra puede reclamar un helado a la salida...". La cajera no había terminado de hablar y yo ya estaba haciendo la fila.

...previamente había conocido a Dios.

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