Semana 203: "Nadie está exento de ser el próximo boludo"

LUNES: Hace un año que estamos con un proyecto, incluso se venía trabajando un año y medio antes de que yo ingrese. En la reunión de hoy pasó algo muy particular: hay que definir ciertos temas y el que trajo el negocio no entendía el negocio, se planteó una situación y todos entendimos A y él entendió B. Ahora me explico por qué se perdió tanto tiempo.

Desde la semana pasada tenía programada una reunión con un proveedor. Anoche me llamó y no pude atenderlo, no me dejó ningún mensaje y le resté importancia. Hoy me quedé esperándolo y nunca llegó, cuando le pregunto me da una respuesta que si bien ya sospechaba, demuestra el poco compromiso que tienen algunos con su trabajo.

Tuve que descifrar el mensaje

MARTES: Estar haciendo algo y tener la cabeza en cualquier lado es sinónimo de problemas. Y si ese algo es sacar plata de un cajero esperemos lo peor, nada de lo que puede pasarte es bueno. Lo importante es que para no repetir otra vez la situación, por lo menos tiene que pasarte una vez para que haya aprendizaje.

Nadie está exento de ser el próximo boludo, y hoy fue mi turno: es la primera vez en mi vida que me voy del cajero y me olvido la tarjeta de débito con el sistema activo. Tuve suerte de que no haya nadie a mi alrededor y de que el cajero se haya dado cuenta de que era un boludo, chupándose la tarjeta y evitando que se la lleven. Cancelé todo y ahora habrá que aguantarse los trámites burocráticos que se vengan.

Por un mundo igualitario con rojos para todos...

MIÉRCOLES: En 2013 y sin entender para qué servía, con las tarjetas del banco recibí una misteriosa tarjeta negra. Según pude averiguar, servía para los VIPs de los aeropuertos. En ese año de abundancia monetaria tuve la suerte de tener mi primer viaje para Argentina a los 3 meses de haber llegado y así fue que conocí este mundo de lujos y excesos.

Luego de cuatro años aprovechando canapés, snacks, bebidas e internet de los VIPs de los aeropuertos, llegó el turno de renovar la Priority Pass. Luego de varias semanas donde nadie del banco supo darme una respuesta, gané por cansancio y logré que me la renueven sin ningún tipo de gasto. Mi estómago y mi bolsillo están disfrutando esta nueva noticia.  

JUEVES: Hoy fue feriado y creo que por primera vez desde que vivo en estas tierras, conozco el motivo del día libre: la independencia de Colombia. Aunque el día se prestaba para muchos planes, elegí el peor de todos: juntarme con dos amigos para trabajar en una propuesta freelance para un cliente externo. Las necesidades hacen que todo dinero extra sea bienvenido. 

Las juntadas no terminan ahí, hoy también fue el Día del Amigo en Argentina y había que celebrarlo con la única gente que iba a entender la importancia de la fecha. Por la noche organizamos con un grupo de amigos argentinos que viven en Medellín y lo celebramos de la manera que mejor nos caracteriza: comiendo. 

En el Caribe, el sol jode más que la lluvia

VIERNES: Este falso lunes fue tomando su estado natural de viernes a medida que iban pasando las horas. Y horas también fueron las que estuve esperando la tarjeta de débito en el banco; comprobé que no importa el banco del mundo en el que estés, a ninguno le importa el tiempo de tu vida que perdés ahí adentro.

La tarde se dividió entre mis nuevas tareas administrativas en el laburo y las compras para el fín de semana en el supermercado. Ya no más viernes de salidas, ya no más volver a casa de madrugada, ya no más borracheras sin resaca. Si la comparamos con los años de juventud, la vida próxima a los 40 es bastante aburrida.

Pensé que era el único que vivía
este sufrimiento pero no, somos dos...

SÁBADO: Me invitaron a un evento solidario para colaborar con un hogar que cuida y rescata perros y gatos de la calle. La propuesta incluía un almuerzo con chicharrón, canto, baile y la oportunidad de hacer mucho por muy poco. Fui un rato para ayudar a este lugar y de paso divertirme con un plan distinto de sábado por la tarde.

La invitación era para medios de comunicación, pero como ya lo he dicho anteriormente es mejor tener amigos que plata. Para mi sorpresa me encontré con más de lo que esperaba: regalos para todos los asistentes, excelente comida, ambiente familiar, gente que conocía y un momento agradable que se extendió hasta que la paciencia dijo basta.

DOMINGO: Generalmente cada inicio de quincena se sale a cenar a algún lugar que no conozca, o a uno que conozca y sepa que se come bien. Tratando de convertir esta apetitosa costumbre en algo útil, empecé otro proyecto que espero le vaya mucho mejor que al blog: Mekateando. ¿Qué es esta palabra colombiana tan extraña?

Significa comer en horarios fuera del almuerzo o cena; por eso a los snacks los rebautizan como "mecato", que sirven para momentos de hambre/ansiedad. Como si dedicarle tiempo a este blog no me consuma gran parte del día, Mekateando va a criticar los restaurante/bares/cafeterías que visite. Los invito a que den Me gusta y como cierre, una referencia que lo resume todo.