Semana 202: El que manda es el presupuesto

LUNES: Aunque a veces hay días muy tranquilos, donde el tiempo sobra sin saber qué hacer; la mañana de hoy fue como una semana compactada en 5 horas. Tuve reuniones con 3 proveedores para que coticen un laburo que necesito y al mismo tiempo, una prueba de vestuario con los modelos protagonistas de una sesión de fotos.

Ya conté el nefasto partido que tuve el viernes de la semana pasada, hoy volvió el fútbol oficial de los lunes y este sí que estuvo bueno. Cuando el rival es complicado y el nivel de los compañeros es bueno, eso te incentiva a correr más. Y corrí tanto que quisieron hacerme control antidoping.

Repartirle regalos a todo el mundo y así le agradecen a uno...

MARTES: La tranquilidad está convirtiéndose en una constante y esto es algo que se disfruta. Atrás quedaron los días de agencia de publicidad donde se corría con propuestas "de ya para ya"; para clientes que saben que no tienen presupuesto pero les importa un culo tu tiempo, te hacen trabajar en exceso para llegar con la lengua afuera y la propuesta termina durmiendo en un mail que nunca es leído. Catarsis mode on...

Si el exceso de trabajo hace que 5 horas parezcan poco y desaparezcan como si fueran 5 minutos, el no tener nada para hacer convierte 3 horas en algo interminable. Y esto pasó por la tarde, muchas veces las tareas se sobrecargan por la mañana y la tarde queda solitaria, como si la jornada laboral hubiese bajado su persiana.

MIÉRCOLES: Cuando vivía en Bogotá y tenía cuenta sueldo en Citibank. La cerré en diciembre de 2013 porque "en teoría" me volvía definitivamente para Argentina. 4 años después recibo un mail avisándome que tenía un saldo a favor, y que pase a retirarlo por alguna sucursal. ¿Será verdad o es una vil forma de engancharme nuevamente como cliente?

Temiendo ser echado como un perro callejero, fui al banco para intentar cobrar ese supuesto excedente en mi excuenta. Como si fuese un milagro inesperado, efectivamente tenía ese efectivo esperándome. Me atendieron de 10, me dieron el dinero y me despidieron con una sonrisa. En Colombia, el servicio y la buena atención se dice Citibank.

JUEVES: La mañana estuvo 100% ocupada en una producción fotográfica para Tienda Verde, el negocio de venta de productos oficiales. Es la primera vez que se hace una campaña publicitaria institucional y las expectativas eran muchas. Tenía una muy buena idea en la cabeza y me entusiasmaba hacerla; pero nada es perfecto, una aparente solución terminará siendo un problema...

Como si el que mandara fuese el presupuesto, gentilmente me seleccionaron un proveedor que trabaja por canje. ¿Qué significa esto? Tengo que adaptarme a lo que me ofrece sin exigir demasiado porque básicamente, lo hace GRATIS. Si bien no salió como quería, se hizo lo mejor posible y salió una campaña bastante digna. Por lo menos estuvo divertido.

La magia del photoshop hará que viajen en moto

VIERNES: Una vez más, el largo y rebelde pelo me obligó a ir a mi peluquería de siempre... De siempre desde que estoy en Medellín. Charlando de fútbol con el dueño (y amigo) conocí a un ricachón de Bogotá que terminó haciendo una invitación de rico y extravagante:
- Qué quieren tomar? Yo invito...
- No sé, una cerveza.
- Qué cerveza!?!?!? Ustedes toman whisky... 

No me gustaba la idea pero en Colombia es muy difícil rechazar una invitación. Y ahí estaba yo, un viernes a las 7 de la tarde tomando una bebida que creía que no me gustaba; creía porque nunca había tomado un whisky caro. Y la sensación fue una sorpresa que baja por el paladar dejando un pequeño fuego en la carganta. No creo que vuelva a vivir algo igual, no hasta que el rico y extravagante sea yo.

Último día del practicante del equipo de diseño. Almuerzo multitudinario para despedirlo.

SÁBADO: Un día anormal, atípico; tenía que correr para terminar de limpiar mi casa, almorzar, bañarme y llegar a tiempo a un cumpleaños impostergable. Y no era cualquier cumpleaños, era EL cumpleaños. Como un relojito suizo; menos el almuerzo, todos los planes estuvieron coordinados y jugando a mi favor: el viaje a comprar la torta, el festejo con la familia y la elección del regalo, justo el que más esperaba.

Luego vendría la segunda parte de los festejos; la cena fue en un restaurante peruano de la puta madre, coincidentemente (o no) llamado De La Pitri Mitri. 1000% recomendado. La noche cerró con otro regalo, más para mí que para ella, una fiesta electrónica con Paul Oakenfold en las bandejas. Gritos, saltos, baile y agite, un cumpleaños como a mí me gusta.

DOMINGO: La noche se estiró todo lo que se pudo; hasta que las piernas y el cansancio dijeron basta, que ante todos los pronósticos fue más de lo que se creía. 3 AM fue el deadline que el cuerpo permitió para divertirse y cerrar una noche de la que se esperaba mucho y pagó cada centavo invertido.
 
Pero como dice el dicho "noches alegres, mañanas tristes"; a medida que aumentan los años en una persona, también aumentan las horas que necesita para recuperarse luego de una noche de fiesta. Así y todo, el destino final fue la casa donde se hicieron los festejos de anoche para terminar de limpiar lo que faltaba. Y como para cerrar una muy buena semana, un nuevo triunfo de Nacional en el arranque del campeonato.

El futuro un tanto lejano de Nacional

Pateándole penales a la mascota