domingo, 28 de agosto de 2016

Semana 160: "No pasó un mes y ya estoy mandándome cagadas"

LUNES: Trabajé en la comunicación del próximo clásico que se jugará el domingo. Más precisamente en la concientización sobre la no violencia en el fútbol y lo más interesante de todo, es que parece que las piezas que pensé van a publicarse tanto en las redes de Nacional como en las de Independiente Medellín. O eso es lo que dijeron...

El nuevo depto con el que empecé una nueva vida; como diría el amigo Jorge Hané "está más lindo que nunca". Luego de esperar su arribo desde China, llegaron las nuevas adquisiciones que vestirán el también nuevo sofá: los almohadones. No sirven de nada pero su presencia es fundamental para que esto se parezca cada vez más a una casa.


MARTES: Como no tengo ningún tipo de problema, no encontré mejor forma de buscármelos que terminar el día laboral, trabar la puerta de la oficina y dejar las llaves del lado de adentro junto con las llaves de mi casa y la billetera. En pleno horario de salida y con el mito derribado de que una radiografía abre todo, logré que llamen a un cerrajero. No pasó un mes y ya estoy mandándome cagadas.

Encima era un día que tenía que estar temprano en casa; primero para una reunión de trabajo por un proyecto laboral paralelo que arranco en breve y luego para ir al festejo de cumpleaños de mi ex profesor de tenis y actual amigo argentino. Llegué para cuando no había más comida pero sobraba lo más importante: Fernet.


MIÉRCOLES: Hay una tranquila y sigilosa tarea que vengo repitiendo hace bastante: prestarle atención a la gente que espera ser atendida. El amor por Nacional es tanto que siempre se repite lo mismo: todos se quedan mirando la vitrina de los banderines, las viejas entradas y los souvenires de jugadores retirados, hipnotizados con tanta historia.

Por la tarde tuve una de esas reuniones en las que sentís que no deberías haber ido; era en el centro y como todo "centro", llegar es un dolor de huevos; en el camino de ida se largó a llover, haciendo más tétrico el viaje; la reunión era multitudinaria y sobre un tema que no manejo todavía. Resumiendo: cualquier lugar en el mundo era mejor que ese.

Tengo cara de meme y nombre sexual

JUEVES: El domingo es el clásico paisa y como todo partido que genera tensiones extra en la ciudad, la idea es bajar la ansiedad de la gente. Aunque eso es imposible en una hinchada pasional y enamorada de su equipo, nosotros hicimos nuestra labor con una campaña de Paz y Convivencia en el Fútbol que anduvo bastante bien, con post que iban de 3000 a 10.000 likes.  

Hacia bastante tiempo que tenía pendiente una salida más que tentadora: jueves de sushi libre. Finalmente hoy fui y caí en la mentira de este tipo de promociones, en la que terminás comiendo la misma cantidad de siempre al mismo precio de siempre. Mi estómago se fue feliz de la vida pero mi bolsillo quedó un poco desilusionado.       


VIERNES: Como contaba ayer, el domingo se juega un partido muy importante en la vida de la ciudad y hoy tuvimos reunión en las oficinas de equipo rival para terminar de definir algunos aspectos. El más importantes: bajar tensiones en las tribunas, con acciones en conjunto que nos muestren unidos y no como enemigos.

La sensación fue extraña porque a pesar de que no nací acá y no siento la rivalidad como sí la sienten los paisas, mi corazón eligió a Nacional desde la primera semana que llegué a Medellín. Y mucho más cuando manejé la cuenta en la agencia en 2014/2015. Y ni te digo cuando entré a trabajar acá el mes pasado... O sea, vamo' mi verde hijueputaaaaaa!    


SÁBADO: Luego de una semana con días y noches bastante lluviosas, no podía no aprovechar los pocos rayos de sol que se animaron a salir sin avisar. Y la mejor forma que encontré fue bajando a la piscina donde pareciera que con agua por delante, el sol se siente más vivo que nunca.

Las estatuas también se cansan de trabajar de estatuas

DOMINGO: Cuando llegué a Medellín en 2014, un creativo del equipo (hincha fanático de Nacional) me metió de lleno en el fútbol local llevándome a ver el clásico de la ciudad. Para meterle un poco de pimienta al plan, mis palabras fueron: "seré hincha del que gane". Ese día el verde aplastó al rival con un categórico 3-1, ganándose toda mi confianza.

Pasaron 2 años y medio de ese momento y hoy, ya formando parte de la familia verdolaga, voy a presenciar mi segundo clásico con todos los nervios y expectativas posibles. Para mi sorpresa, Nacional volvió a ganar y podría decirse que vengo invicto, con un 100% de efectividad en los 2 clásicos vistos.

El sol regaló una postal para llevarse en la retina (del celular)



domingo, 21 de agosto de 2016

Semana 159: "Con tiempo siempre viene lo mejor"

LUNES: Luego de haber hecho la compra hace dos meses, luego de que hayan hecho el despacho hace un mes, luego de haber esperado a que se resuelva el paro camionero que mantuvo a Colombia a la deriva por dos semanas, finalmente me llegó la mesa del living! Ya podemos decir que esto es formalmente una casa...

El feriado de hoy se disfrutó mejor en el cine, aunque la película elegida me devolvió poco de todas las fichas que le había puesto: La Vida Secreta de las Mascotas. El trailer era tan vendedor que esperaba mucho más; gráficamente es excelente y muestra a NY de la mejor manera, pero por momentos es lenta y tiene personajes caóticos; creo que Intensa-Mente le dejó la vara muy alta a las películas animadas.


MARTES: Desde el sábado a la noche vengo arrastrando una leve pero molesta descompostura estomacal que me tiene pelotudo. Automedicándome y con una dieta autoimpuesta, fui a trabajar pero mi cara delataba mi verdadero estado. Aguanté hasta donde pude y a la tarde me fui, mañana espero estar mejor. 

Llegué a casa y tuve una maratón de Stranger Things, lo nuevo de Netflix. Sólo había visto el capítulo 1 y eso alcanzó para entusiasmarme y convencerme de que necesito urgente una nueva temporada. Arte y fotografía con salud a 80s, buenas actuaciones y una banda de sonido ideal para treintañeros. Para muestra, una de las mejores canciones de la serie en una versión aún mejor que la original.

Hay cosas extrañas que pasan en el blog y nunca se cuentan
  
MIÉRCOLES: Madrugué igual que ayer, pensaba que estaba mejor pero nada había cambiado. Fui al laburo y evidentemente mi cara seguía siendo la de un cadáver vivo, porque me mandaron al médico de una. Nuevos medicamentos, dos días de reposo y a esperar a que todo se solucione. Muchos están igual, hay un virus jodiéndole la vida a la gente.

Publiqué en FB que buscaba Fernet y en cuestión de horas, un amigo me regalo una botella y otro desde Argentina me consiguió donde comprarla en Medellín. A esta altura creo que voy a tatuarme la frase "es preferible tener amigos que plata"; porque aunque siga siendo un pobre, seré un pobre feliz por los amigos que tengo.


JUEVES: Segundo día de reposo o como le dicen acá: incapacidad. Hoy el despertador no sonó a las 6 de la mañana y mi cuerpo me demostró lo feliz que estaba despertándose mucho mejor (si lo comparamos con lo deplorable que estaba ayer). Con ese nuevo estado de salud encaré el día, que por lo que se veía iba a ser muy relajado. 

Aproveché para descansar a full y recuperarme tanto física como "televisivamente"; durante todo el día estuve en la cama conectado a Netflix poniéndome al día con House of Cards, serie que me está trayendo grandes satisfacciones. Si todavía no la empezaron o dudan con los primeros capítulos, esperen que como pasa siempre, con tiempo siempre viene lo mejor. 
    
Estacionamiento que no discrimina por tipo de auto...

VIERNES: Dos días sin ir a trabajar por enfermedad son suficientes para que te pierdas de mucho; por ejemplo, llegar y enterarte que hoy no se trabaja, hay fiesta de integración entre empleados. Con la rapidez suficiente como para estar de vuelta en la oficina a las 9 (horario de salida), fui a casa a buscar una campera porque según me dijeron "íbamos a tierra fría".

La fiesta era en una sede que Nacional ya no usa y la tiene para este tipo de eventos internos. Según me contaron, fue la casa de Mostaza Merlo en 1999 durante su estadía como técnico y además era el lugar preferido por otro argentino (Ramón Cabrero) para los entrenamientos y concentración del equipo en 2009. Por lo que vi tenían razón, un lugar hermoso por donde lo mires:


SÁBADO: Hace tiempo que estoy buscando una bicicleta estilo clásica para ir y volver del laburo (lo tengo a 15 cuadras). Un amigo se ofreció a llevarme a La Minorista, una especie de Mercado de las Pulgas de Colegiales pero con productos de dudosa procedencia, bastante olor a humedad y nada nada fashion. Entre todo ese combo de cosas no encontré lo que quería, seguiré buscando.

La ironía dice que a veces, lo que hace bien te puede jugar en contra. A la tarde tenía que hacer mil cosas pero estaba tan cansado que me dejé llevar por una siesta reparadora. Esto podría considerarse como una inversión a favor del descanso del cuerpo, pero me sacó tiempo y al final no pude hacer algunas de las muchas tareas que tenía pendiente.

3 restaurantes con nombre sureño

DOMINGO: Culpo a la cadena internacional Fox y a su nuevo ciclo Domingos de Flojera, ellos y su maratón de Los Simpson fueron los culpables de que se me haya ido medio día en la cama viendo un sinfín de capítulos geniales que me transportaron a través de 25 años de historia amarilla. Dudo que esto se vuelva a repetir y si es así, así lo esperaré; preparado para lo que venga.


lunes, 15 de agosto de 2016

Semana 158: "la recomiendo solo si tenés un viaje en bus a la costa"

LUNES: Sabía que pasar de una agencia a una empresa tenía este riesgo, pero no pensé que era para tanto. Como conté la semana pasada, me está costando bastante acostumbrarme a este nuevo ritmo laboral atípico que estoy teniendo; demasiado tranquilo para lo que vine haciendo durante los últimos... 15 años de carrera.

Lo que me sorprende bastante son los hinchas/fans/seguidores en redes sociales. Pensamos y publicamos varios post referidos al viaje a Japón del equipo y generaron una cantidad de likes que nunca en mi vida voy a tener en mi FB: 20.000, 23.000 y 28.000. Las que menos tuvieron fueron 7.000, 8.000, 9.000 y 12.000; y uno contento porque alguna boludez que sube llegó con suerte a los 100 likes.  

No llueve, es el sol del Caribe

MARTES: La cosa empieza a ponerse interesante, surgió la posibilidad de filmar al equipo haciendo una actividad divertida, un juego para que se entretengan durante la concentración en el hotel y ya tengo el OK. Ahora toca esperar a que vuelvan de Perú que juegan por Copa Sudamericana y programar todo, tentativamente para la semana que viene.

Subimos a la sede donde entrenan para ver los detalles finales del Centro de Alto Rendimiento que se está terminando de construir. La anécdota es que cuando era Director Creativo en la agencia, nosotros hicimos el evento de inauguración de esas mismas obras. Hoy, dos años después, me toca estar de este lado viendo cómo ese proyecto está por ver la luz.


MIÉRCOLESMe tocó volver a hacer algo que creía en el olvido: la evaluación de los practicantes. Hoy vino una representante de la universidad para charlar sobre los avances de su alumno en la empresa. Como cuando estaba en la agencia, terminé cobrando esas buenas palabras en chocolates; es con lo único que soy fácilmente corruptible. 

Parece que las ganas de estudiar no se terminaron con mi época de desempleado, empecé un nuevo curso online que me va a mantener ocupado las próximas semanas. La temática es por demás conceptual: para darle un buen uso a todo ese tiempo libre que estoy teniendo, nada mejor que meterme en un curso de Productividad Personal.

Horario de salida laboral en la autopista

JUEVES: Fue un día como los que me gustan a mí, cargado, movido y con muchas cosas por hacer. Durante la mañana estuvimos en un evento de la Alcaldía, el presidente iba a dar una charla y preparamos todo el material visual. Se estuvo corriendo con esto desde ayer, ¿para qué? Para que no se use nada de lo que llevamos... ¿Y qué pasaba si no llevábamos nada? Seguramente nos lo pedían y quedábamos para el orto, así es la vida. 


12 de la noche en punto sonó el timbre de casa y ese sería el comienzo de la travesía de 3 amigos de Bogotá que vinieron a visitarme y a pasar el fin de semana en Medellín. Los atendí dormido (como corresponde) y aunque quería, no pude darles mucha bola; despertarme todos los días a las 5.50 AM no permite que sea persona luego de 11 de la noche.

Así me fueron contando su salida y llegada a Medellín

VIERNES: Me sorprendieron muchas cosas en estos más de 3 años que llevo viviendo en Colombia. Sacando lo obvio (las mujeres, los paisajes y la calidez de su gente), lo mejor que vi fueron los nombres con los que bautizan negocios y/o productos. Tener un listado hubiese sido muy divertido pero interminable, aunque creo que este gel para el pelo me ayuda a graficarlo mejor:


SÁBADO: Ya con tiempo disponible de sobra, pude dedicarme por completo a mis queridos amigos que vinieron a visitarme gracias a una borrachera que tuvimos en mi último viaje a Bogotá. Ésta fue la única manera que encontré luego de insistir durante 3 años, lamentablemente sé que no volverán si en el futuro no empleo la misma técnica de persuación.

El día estuvo ideal para hacer de todo: disfrutamos del sol en la piscina, hicimos preguntas filosóficas del estilo "¿si fueses un superhéroe, cuál serías?", probaron la mejor pizza de Sabaneta, escuchamos música que nunca sonó en mi casa y como cierre, empezamos la noche en un restaurante italiano y la terminamos en el bar que más me gusta de Medellín. Con este grupo, tenés risa asegurada en todo momentum.

Gratis lo que sea, incluso alimento para gatos
Explicando la difícil tarea de resolver un ta-te-ti

DOMINGO: Luego de un desayuno suculento y de una mañana demasiado escueta (producto de la noche de anoche) tuve que despedir a este grupo de inadaptados que se tomaron mi casa durante casi 3 días y la quisieron llenar de ideas vegetarianas (luego me desintoxiqué con un sabroso pedazo de carne). Muchas gracias por venir, estoy feliz de haberlos visto y los espero pronto!

El cine volvió a cerrar los domingos de depresión, esta vez con una película que tocó ver por descarte, y me demostró que mantenía ese mismo concepto en argumento y diálogos. Aunque entretiene por dos horas, no me dejaría tentar tan fácil por esas frases y esas 5 estrellas mentirosas en el afiche; la recomiendo solo si tenés un viaje en bus a la costa.