Pero las sorpresas no terminaron ahí, desde el 24 de diciembre había un regalo esperándome en casa. En Colombia los regalos no son repartidos por Papá Noel sino por el niño Dios -si el verso de un gordo abrigado en verano repartiendo regalos en un trineo no es creíble, imaginen si ahora habláramos que lo hace un niño...- El pendejito me escuchó y por fin me dió el gusto de tener una valija de herramientas. Testosterona al 1.000%.
MARTES: El sueño que arrastro producto del jet-lag -el término más cheto que escuché en mi vida- sólo pude pasarlo con un mini-gran evento. Se fue uno de los jugadores más queridos de los últimos tiempos y la hinchada quiso homenajearlo con una despedida que incluyó tatuajes, palabras sentidas, lágrimas y hasta un cuadro de recuerdo.
Este jugador es venezolano y se supo ganar a todos gracias a sus "huevas" -acá es femenino-. Incluso este exceso de amor se convirtió en el tatuaje de uno de los hinchas, que subió al escenario para mostrar orgulloso su hazaña. Cuando se despidió habló con el corazón y casi que lloraron todos; los casi 2000 hinchas quisieron que se lleve el mejor de los recuerdos y por lo visto, en el aeropuerto tendrá que pagar exceso de equipaje.
Un infiltrado en el medio de la foto |
MIÉRCOLES: Esta vuelta al laburo también me recibió con una gran cantidad de proyectos a concretarse en las próximas semanas. De hecho, uno de ellos es un evento propio el viernes de la próxima semana. Estamos diseñando los últimos detalles, detalles que tengo en standby desde octubre del año pasado pero ahora se reactivaron... 9 días antes del evento.
Pasó algo lindo, y fue recibir las felicitaciones de una persona importante de la parte administrativa por un trabajo hecho el año pasado. Justo el día previo a mis vacaciones me concentré en terminarlo porque no podía suspenderlo y parece que le gustó a todo el mundo. Bien aheeeeeeee...!!!
Con este arsenal pienso enfrentar el año... |
JUEVES: Con un diseñador en vacaciones, un practicante recién ingresado y la diseñadora que se tuvo que ir por sentirse enferma, así tuve que aguantar los trapos con todo el laburo que se vino de repente. Pero no todas son pálidas; se alinearon los planetas y el evento que ayer iba a ser en 9 días, lo pasaron hasta dentro de 13 días. En el mundo publicitario, ese tiempo extra es una eternidad.
Mi cuerpo ya no es el que era hace un mes atrás; las vacaciones en Argentina fueron para todos (para mí y para mi vida pseudofit). Ahora que estoy instalado nuevamente en Medellín, volví a las rutinas que mantenía anteriormente y entre ellas el gimnasio. Empecé en uno nuevo y para mi sorpresa, por cumplir su aniversario me regalaron las primeras 6 clases gratis. Califica para ser la primera buena noticia de 2017.
Vas al supermercado y de repente... |
VIERNES: Como conté ayer, falta poco para el evento de inauguración del Centro de Alto Rendimiento en Guarne; el nuevo tiempo extra hizo que los preparativos vayan viento en popa (frase nunca dicha por nadie en el mundo). Fui temprano con compañeros para ver algunos detalles y en el camino, paramos a desayunar en la casa de los padres de uno de ellos.
Gracias a esto conocí la famosa hospitalidad de la madre paisa que tanto me hablaron durante estos años; llegamos sin avisar y en minutos teníamos armado un megadesayuno con chocolate, huevo revuelto con salchichas, arepa y buñuelos. Habiendo desayunado antes de salir e imposibilitado de negarme ante semejante plato, salí explotado pero feliz.
Llegó la colección de prendas Nike 2017. |
SÁBADO: Se dividió en dos, como usualmente serán los sábados a partir de ahora. En primer lugar estuve en el restaurante cumpliendo mi nueva misión de mesero/cobrador/gerente/dueño/mensajero, haciéndole pequeños arreglos al lugar para avanzar en el proceso y dejarlo lindo para una futura próxima inauguración.
El segundo lugar está reservado a la noche. Acá también los momentos se dividieron en dos: la cena en un restaurante recientemente inaugurado llamado Victoria Regia -espacios gigantes, comida vegetariana espectacular, escenario para bandas- y luego unos tragos en Chiquita, un bar gay que me recomendaron para tener una salida distinta/bizarra. Muestro las fotos pero me guardo las anécdotas:
DOMINGO: Luego de varias lluvias que sorprendieron a más de uno (supuestamente acá también estamos en verano), se podría decir que ahora sí el sol del caribe llegó para quedarse. O así lo demostró durante los últimos días de calor intenso, ideales para estar en la piscina y pasar del blanco teta a algo un poco menos mortuorio.
El día invitaba a convertirse en un lagarto que sale entre los pastos a calentar su sangre fría por un rato. Y así se hizo, con una estadía rabiosa de casi dos horas mañaneras que concluyeron en un rico almuerzo y una nueva maratón de Better Call Saul. Ahora sí; vení tranquilo 2017, no te tenemos miedo.
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